El trovador dice lo inconveniente. El bufón lo conveniente.
Talvez por esa razón el bufón duerme caliente y come todos los días.
Dice
el trovador:
Yo canto por cuenta y parte
Del lugar de donde vengo
De mi gente y su abolengo
De mi pueblo y su baluarte
Y digo el sentir del pueblo
Vomitando la amargura
Del que vive en la atadura
Por el poder agobiante.
Dice
el bufón:
Yo canto por cuenta y parte
Del que me da la limosna
Del señor al que le sobra
Y que nada lo comparte
Pues del poder hace un arte
Y del poder un negocio
Sin mirar entre su ocio
Más que su propio estandarte.
Dice
el trovador:
Yo canto por cuenta y parte
Del que lucha en la trinchera
Y defiende como fiera
Sus cachorros y futuro
Y que no tiene ni un duro
Cuando llega fin de mes
Esclavo del alquiler
Y los dueños del cianuro.
Dice
el bufón:
Yo bailo por cuenta y parte
Del que vive en el castillo
Que tiene todo sencillo
De la mañana a la noche
Y que pasea en un coche
De esos de los importados
Con platita en sus bolsillos
Y un reloj de oro engarzado.
Dice
el trovador:
Yo canto por cuenta y parte
Del que habita el rancherío
Del que su vida es hastío
Y que su nada comparte
Pues no hay superior baluarte
Que la unión y la empatía
Con el que quedó en las vías
Sin mendrugos para su hambre.
Dice
el bufón:
Yo canto por cuenta y parte
Del que compra la justicia
Que es señor de la avaricia
Y del juez es su compadre
Que no hay culpa de su madre
Si ha nacido cicatero
Embaucador, embustero
Y sin perro que le ladre.
Dice
el trovador:
Yo canto por cuenta y obre
Del que cree en la esperanza
En la justa y su balanza
Aunque es ciega para el pobre
Que nunca tiene ni un cobre
Pa’ comprar al abogado
Ni a algún otro desalmado
Que se prende en la vil tranza.
Dice
el bufón:
Yo actúo por cuenta y parte
Del que paga mi comida
Del que me salva a escondidas
Si algún embrollo me mando
Y por él me meto al fango
Si lo veo en un aprieto
Y a su arbitrio me someto
Si es necesaria mi vida.
Dice
el trovador:
Yo canto por cuenta y parte
Del ingenuo e ignorante
Que teme rivalizar
Con el cíclope opulento
Que le viene con el cuento
Que si gana la elección
Va cambiar su pobre vida
De mendigo a ricachón.
Dice
el bufón:
Yo canto por cuenta y parte
Del letrado y el patrón
Del avaro y el panzón
Y del señor gobernante
Que son dueños de mi aguante
Y mi santa devoción
Y comprarán mi cajón
Si la parca lo demande.
Dice
el trovador:
Yo canto por cuenta y parte
Del maestro y el obrero
Del altruista y justiciero
Y del cura militante
Que son los representantes
Del pueblo y de su vigor
Esa gente que es de honor
E igualdad es su estandarte.
Dice
el bufón:
Yo moneo a cuenta y parte
Del dueño de la manija
Que la corrupción cobija
Con mano de fino guante.
Que nunca fue laburante
Y siempre vivió de arriba
De la política furtiva
De todo vil gobernante.
Dice
el trovador:
Yo entono por cuenta y parte
Del que sufre la injusticia
A manos de la avaricia
Del glotón y el insaciable
Que al pobre cortan los cables
De una vida en paz y justa
Porque le dan con la fusta
Y con la corva del sable.
Dice
le bufón:
Yo actúo para el que es sordo
Es ciego, insensible y vil
Del poder siempre servil
Y es mudo y de vientre gordo.
Y que anida como el tordo
En un nido que es ajeno
Y es rápido como trueno
Pa’ de la justicia huir.
Dice
el trovador:
Amigo yo me voy yendo
Es claro su parecer
Siempre servil ha de ser,
Nunca estaremos de acuerdo
Pero ansina le recuerdo
Que si la justicia mengua
Yo sin pelos en la lengua
Estaré pa’ proceder.
Dice
el bufón:
Amigo: juro lo entiendo
Pero yo hago mi negocio
Le saco rédito al ocio
Y al bolso del opulento
Que se come el dulce cuento
De que canto a su favor
Pero entono en mi menor
Mi propio discernimiento.