Si
tus manos me faltaran,
Si
tus ojos se cerraran,
Si tus palabras callaran.
Si tu
corazón fallara,
Si el
aire se te negara,
Si
tus pies no me llevaran,
Si
tus besos me dejaran.
Si tu voz ya no escuchara,
Si
tus cuentos se esfumaran,
Si tu
amor se me escapara,
Si tu
regazo se enfriara…
¿Sabes
cuán duro sería para mí, MAMÁ?
Es tan duro como leerlo, aunque la poesía es sentida y valiente, no nos atrevemos ni a pensar en ello. Hermosa reflexión en versos. Saludos.
ResponderEliminarGracias RosaMaría. Saludos!
ResponderEliminarLo es, duro, y mucho. Duele el alma por la ausencia,siempre necesaria y querida de una madre...un simple apretón de su mano curaba heridas. Un saludo, Andrés.
ResponderEliminarGracias Nenúfar por tus palabras y visita. Un abrazo!
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